Según estudios realizados, la puntualidad es una costumbre que contiene un valor en sí misma, ya que la disciplina de cumplir con lo pactado, implica, entre otras cosas, el desarrollo de una mejor organización, mayor disponibilidad para realizar ciertas actividades, y una alta capacidad productiva en todos los aspectos de la vida.
Chile es un país que se caracteriza por tolerar la impuntualidad, por lo cual quienes acostubramos respetar el tiempo ajeno, nos vemos obligados a adoptar nuestras costumbres a la informalidad de otros.
El hábito del retraso, además de ser una gran falta de respeto, refleja aspectos propios de individuos de bajas exigencias con ellos mismos, desinterés en el crecimiento personal y flojera, que al final de todos los análisis, no es más que falta de confianza en uno mismo.
fotógrafo: Lanpernas 2.0
Efectivamente: nadie tiene el derecho de disponer del horario de otra persona.
Si bien yo soy puntual con la hora comprometida, no se puede emitir juicios categóricos, como que es flojera, puede ser para quien dispone de facilidades de transporte y sólo una preocupación a la vez. Cuidado con los juicios, es mejor quedarse en el diagnóstico, pero no concluir y adjetivizar.
Un beso
Gracias Manu por tu comentario. Y por tu adorable puntualidad.
Comparto el comentario con Manuel , yo también siempre trato de ser muy puntual , pero no siempre las cosas son tan perfectas , y se dan como uno quiere , las horas hay que repetarlas y de lo contratrio podemos dar pronto una explicación verdadera que nazca de nustro corazón . Besos Rossana