“Un maestro Zen, en una charla con sus discípulos, levantó un vaso de agua. Todos los discípulos esperaban la típica pregunta:
¿Está medio lleno o medio vacío?
Sin embargo, el maestro preguntó:
– ¿Cuánto pesa este vaso con agua?
Las respuestas variaron entre 200 y 250 ml, pero para asombro de todos, el maestro respondió:
“El peso absoluto no es importante, depende de cuánto tiempo lo sostengas en tu mano”
Si lo sostienes 1 minuto, no hay problema.
Si lo sostienes una hora, te dolerá el brazo.
Si lo sostienes durante 1 día, tu brazo se entumecerá y se paralizará.
El peso del vaso no cambia, pero cuanto más tiempo lo sostienes más pesado y difícil de soportar se vuelve.
Y continuó:
Las creencias limitantes y negativas, que emiten los pensamientos negativos y destructivos son como el vaso de agua.
Si piensas en ellos un rato, no pasa nada.
Si piensas un poco más empiezan a doler y
Si piensas en ellos todo el día, acabaras sintiéndote paralizado, incapaz de hacer nada y de ponerte en acción…”
¿No te parece que son muchos los pensamientos que sostenemos durante días y años que nos dañan mucho?
Estos pensamientos repetidos constantemente van creando patrones mentales que luego rigen nuestras vidas. Por ello es tan importante detenernos y comenzar a analizar de qué forma nos hablamos o nos describimos . Dejemos de sostener, día tras día lo que nos destruye, y cambiar creencias que nada bien nos hacen.
¿Cuánto pesan tus creencias limitantes?

Hola!
Me encantó la enseñanza del cuento zen,me llega en cuanto a que mantengo muchas de las creencias que son heredadas,me doy cuenta,las reconozco y no me ha sido posible liberarme o cambiarlas por otras más sanas y positivas.
Saludos!
Rita.
Es bueno cada cierto tiempo revisar nuestras creencias.
Si algunas ya no nos sirven, ¡renovarlas por otras que aporten en nuestra evolución!