Si todavía no encuentras a tu alma gemela lo primero que debes considerar es que tu felicidad no depende de esta circunstancia, si no única y exclusivamente de ti.
¿Quieres verdaderamente hallarla? No tienes que ir a buscarla a un bar ni a cualquier otro sitio.
Sólo debes ser y brillar con aquello con lo que tu alma se sienta en sintonía.
Vibra con aquello que aprecias y tu vibración atraerá a un otro que, en algún lugar del mundo,  vibra en el mismo tono que tú.
Concéntrate en tu luz, y el amor vendrá por sí solo, atraído por ese resplandor que verá brillar en ti.
Confía. ¡Brilla y sé feliz!
 
Ilustración: Danza en Bougival, de Pierre Auguste Renoir