Relanzamiento

kaboompics / Pixabay

 

En tiempos antiguos la espiritualidad abundaba en nuestras vidas. Los alimentos se bendecían antes de cocinarlos y se daba las gracias en la mesa antes de comerlos. Las mujeres protegíamos nuestros hogares e invocábamos a los espíritus de la naturaleza para cosechar, limpiar, cocinar, amamantar, tejer, hilar, amar y orar. Los conjuros eran pan cotidiano y todos los aspectos de la vida estaban atravesados por ceremonias o rituales que hacían sagrada la existencia.

Hoy hemos perdido esta mística y se ha debilitado nuestro espacio vital. Pero podemos recuperarlo. Sólo nos hace falta tomar conciencia de que el Espíritu no puede esperar.

En el año 2010 surgió Haciendo Sagrado lo Cotidiano, como una propuesta femenina y personal, de traer el perfume de lo divino directamente al corazón de nuestra vida humana. Hoy, muy acorde a los tiempos acuarianos que atravesamos, se despliega como un renovado proyecto colaborativo, que alquimiza los principios femenino y masculino, no tan sólo como página, sino como lugar de encuentro.

Nuestro mundo está cambiando. Lo público y lo privado se mezclan, lo digital y lo natural se interconectan, lo espiritual y lo material inician un matrimonio, cuyo alcance escapa a nuestra vida.

Nuestra humanidad individual también se ve sometida a este proceso, llevando a cada uno de nosotros a una expansión rigurosa y desafiante, porque involucra todos los aspectos de nuestra vida.

En Haciendo Sagrado lo Cotidiano queremos ser testigos y actores de este gran proceso, sin dejar nada afuera. Espíritu es materia, y materia es espíritu.

Por eso, nuestros cursos, talleres, ceremonias -nuestra mirada finalmente- no sólo incorporan tradiciones antiguas, sino también acervos que están naciendo. No tememos al cambio, ni a las nuevas facetas, con que el espíritu se está revistiendo en la materia. Espíritu y materia requieren nuevas visiones, revisiones y aproximaciones.

Así, Haciendo Sagrado lo Cotidiano renace hoy, bajo el mismo influjo de su fundación, queriendo ser una fuente de dónde emanen buenos pensamientos y buenas acciones, para proporcionar sentido, bienestar y sanación a todos quienes nos visiten, y se constituye, como un sitio de exploración de los ámbitos simbólicos de nuestra vida y de nuestra psique, como una invitación a bucear en el Sí mismo, en relación con nuestra espiritualidad, aquí y ahora, no allá y entonces.

Honramos cada uno de los pasos del camino, los suyos y los nuestros, en la trama infinita y eterna del amor.

¡Bienvenidos!

Mónica De Simone Paoletta y Christian Rodway Flores