Iniciamos este nuevo año, con la energía de Júpiter y Neptuno en Piscis, conectándonos de manera más íntima y profunda con la Fuente. El despertar espiritual de la humanidad es ya un hecho, siendo todos, cada vez más conscientes, de que somos uno, de que todos portamos en nosotros la chispa divina, y de que lo que le hacemos al otro, finalmente repercute en nosotros, porque la separación es una ilusión.
Y esta retrogradación, pondrá el acento en lo que hemos logrado en nuestras relaciones, sobre todo en los vínculos estables de nuestra vida, apreciando lo que nos aportan.
Ayer sábado, Mercurio salió de Capricornio y entró en Acuario. La energía de las comunicaciones se moverá a las redes, a lo tecnológico, a lo nuevo, a la apertura grupal (antes de su primera retrogradación del año por ahí por el 13, 14 de Enero).
El jueves, día de Reyes Magos, es una de las fechas en que celebramos el día del astrólogo ( la otra, mayoritariamente asumida por la comunidad astrológica, es el 21 de marzo, o más exactamente, la fecha en que cada año el Sol ingresa a Aries). ¡Felicidades a todos los colegas, profesores y alumnos que disfrutamos interpretando los símbolos del cielo!
Hacia el fin de semana, el domingo, tendremos la conjunción Sol Venus, el famoso Venus Star Point , que es un aspecto muy bueno para disfrutar de la vida, para conectar con aquello a lo que le damos valor, y también, por qué no, un buen día para hacer ajustes estéticos, en el look, o también en la imagen profesional, pero ojo, si los tenemos bien pensados (pues Venus está retro).
Ese mismo día, Marte en Sagitario, que es como una especie de caballo desbocado, hará cuadratura a Neptuno en Piscis. Podríamos esperar una gran expansión en relación al temón mundial que estamos viviendo; probable propagación del virus, por lo que en los días venideros, -más o menos entre el 8 y el 12 de Enero-, habrá que aplicar mucho discernimiento, pues volverán las tensiones entre no querer someterse a las nuevas restricciones, y la sicosis colectiva. Conflictos por circulación, fronteras, viajes, pases sanitarios y demases, quizás también desde el punto de vista legal. Es lo que ya vivimos en el 2020, pero podría exacerbarse. Ojo entonces con los medios, y con la información que nos tragamos; siempre atentos al pensamiento crítico.
Seremos libres, sí, pero todavía no.