¡Llegó Diciembre! Estamos con la Luna en cuarto creciente, activando, y venimos de Neptuno, que se puso directo en su domicilio, Piscis. Neptuno es intenso y de alcances insospechados, vasto y profundo como el mar, y tiene que ver con la confusión que experimentamos hoy (no tiene bordes, no tiene límites), y también tiene que ver con la evasión, como su sombra. Vamos como humanidad hacia el “Somos Uno” pisciano y neptuniano (Neptuno es el regente de Piscis), hacia un renacer espiritual potente, hacia una disolución de las fronteras, pero poco a poco, de manera muy errática, todavía.
Urano, Neptuno y Plutón son los planetas transpersonales, los de mayor lentitud, es decir, se quedan muchisimos años en algunos signos, y eso hace que vayan marcando los cambios a nivel mundial. (Urano 84 años; Neptuno 164, y Plutón 240 años).
La entrada de Plutón en Capricornio, por ejemplo, se dio en el año 2008, comenzando a gestar la caída de las antiguas estructuras, la destrucción de una vieja realidad, para ir instaurando, poco a poco una nueva realidad.
Saturno también está en su signo, Capricornio, y mañana entrará Júpiter en el signo de la cabra, que sube la montaña, lento, pero seguro. Muchos planetas en Capricornio, van a ir formando un stellium de aquí a Marzo, potenciando la energía. Los acontecimientos sociales así, -de Chile y el mundo-, estarán a la vista de todo el planeta, y las nuevas estructuras, las nuevas aspiraciones, las nuevas construcciones de la humanidad, se irán consolidando tras el derrumbe propiciado por Plutón. Mercurio en Capricornio nos invita a pensar y comunicar profundo, y Venus en Capricornio nos ayuda a consolidar a largo plazo.
Júpiter es el protagonista de esta semana, que se quedará en Capicornio, poco más de un año. Júpiter es el gran benéfico, que todo lo expande. Podríamos esperar entonces, entre otras cosas, movimientos telúricos y cambios en lo material, en la tierra, en el clima, y también en los grandes dinosaurios: la política, las instituciones. Tendremos también un trígono con Urano y entonces quizás veamos que la banca mundial se ponga cada vez más electrónica o nos dé sorpresas inesperadas.
Marte sigue en Escorpio, manteniendo la tensión que se inició en la primavera, en oposición a Urano. Podría seguir la violencia, y sí o sí, la revolución. Esto a nivel colectivo; a nivel personal podríamos esperar discusiones y confrontaciones por emociones exaltadas y polarización de la energía. Entonces, una vez más lo reitero: ¿para qué sirven estos pronósticos? Para que si tenemos la información, hagamos algo positivo con ella. Gobernémosnos y dominemos nuestra reactividad. Discernimiento, fuerza interior y templanza. ¿Con qué fuerza cooperamos? ¿Con la oscuridad y el miedo, o con la luz y la esperanza?
La pregunta que más me hacen es ¿cuándo se va a terminar esto? Y la respuesta es que tenemos para rato. Habrá que aprender a vivir en la incertidumbre, en la nebulosa, mientras trabajamos en nuestra ira interna, porque como es adentro es afuera, y mientras antes nos hagamos cargo, de manera individual, antes podremos entrar, de manera colectiva, a la Nueva Tierra.
Martes 3 y miércoles 4, mejores días para acuerdos y encuentros. Seguimos haciendo Astrología para todos.
El 12 del 12 se viene la Luna Llena, y tendremos en Casa Haciendo Sagrado lo Cotidiano, la Sintonización Mundial Bendicion del Útero. Los cupos se completaron en dos días. Gracias a todas las hermosas mujeres por su confianza, y por sostener juntas, el rezo y el amor.